La Policía detiene a un groomer por un presunto delito de agresión y abuso sexual a una menor

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El arrestado captó a su víctima a través de las redes sociales Instagram y Whatsapp, mediante el «grooming», una modalidad que consiste en el engaño de un adulto para obtener fotografías o videos eróticos de menores a través de redes sociales o incluso la preparación para un encuentro sexual

La Policía Nacional ha detenido a M.L.R. de 40 años de edad y con domicilio en Burgos, como presunto autor de un delito de grooming.

En el mes de enero del presente año la víctima, menor de edad, acompañada de su madre fueron a Comisaría, donde interpusieron una denuncia debido a que una persona había contactado con la niña a través de la red social Instagram, ganándose su confianza al darla opiniones favorables en forma de likes (me gusta), cuando la menor subía videos musicales a internet.

El groomer dio el paso siguiente, al comenzar a whasappear con la niña sabiendo en todo momento la condición de menor de la víctima, requiriéndola fotografías de carácter  íntimo, manteniendo con ella conversaciones de contenido sexual. Finalmente le propuso a la menor quedar con ella en varias ocasiones para «enrollarse»  pero que estos hechos no fueran en público y no se lo contara a nadie.

Las investigaciones policiales permitieron localizar y detener al groomer, siéndole intervenido su terminal móvil, en el que tras un minucioso examen se podrá determinar si existen más víctimas de este acosador sexual. El detenido pasó a disposición de la Autoridad Judicial quien decretó una orden de alejamiento, así como la prohibición de comunicarse con la víctima menor por cualquier medio.

La conducta del arrestado encaja en una tipología delictiva que se define como child-grooming y que se define como el conjunto de estrategias que una persona adulta desarrolla para ganarse la confianza de una menor a través de Internet con el último fin de obtener concesiones de índole sexual. El autor usa primero un acercamiento lleno de engaños y, posteriormente, comienza el  chantaje para obtener imágenes comprometidas de la víctima menor de edad. En casos extremos, los autores pretenden un  encuentro en persona para lo coaccionan y acosan a los menores para lograr su propósito.

La Policía Nacional recuerda la importancia de denunciar este tipo de hechos y aconseja

– No proporcionar o compartir imágenes privadas o comprometedoras a través de las redes sociales.

– Desconfiar de desconocidos, en el mundo virtual no todo el mundo es quien dice ser.

– No ceder nunca al chantaje del acosador y solicitar la ayuda de un adulto o de la Policía en caso de estar siendo víctima de acoso o intimidación en Internet.

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