Ciudadanos tacha de inaplicable la ordenanza vial
La formación Ciudadanos Burgos apuesta por un modelo de ordenanza vial compacta que favorezca la movilidad sostenible y la convivencia
La ordenanza vial de movilidad que será incluida en el próximo Pleno Municipal del 4 de septiembre presenta muchas taras. Así lo ha manifestado el concejal del Grupo Municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento, Vicente Marañón, que acusa de ser una ordenanza “costosa” temporal y económicamente. Al mismo tiempo, culpa la “falta de organización entre las áreas municipales competentes», ya que la ordenanza ha sido elaborada en paralelo al PMUS, el Plan de Movilidad Urbana Sostenible de Burgos.
Con respecto a la regulación del tráfico en esta ordenanza, Marañón considera tratado con «frivolidad y laxitud» ya que «parece habilitar a cualquiera con una gorra para ordenar el tráfico en la ciudad».
En cuanto al artículo referente a las obras en las calles de Burgos, cree que «son un caos tradicional y legendario» y ha trasladado el propósito de su partido de que el ciudadano esté debidamente informado siempre que se trabaje en la vía pública con datos visibles que indiquen qué se hace, durante cuánto tiempo, quién es el responsable e información de contacto.
Desde la formación naranja creen que la actual modelo de circulación de bicicletas es un “fracaso”, por ello abogan por la movilidad con un sistema de ciclovías “seguras y modernas” que favorezca la convivencia entre ciclistas y peatones.
Marañón asegura que el diseño que plantea este artículo es contrario ya que arrebatan el espacio de aceras obstaculizando a peatones. Por ello, el concejal pide al Equipo de Gobierno una regulación seria del uso de la bicicleta que pasa por sacar las bicicletas de las aceras. Además, Marañón califica de “aberración” que la ordenanza aparte a los discapacitados de las aceras obligando su circulación por las ciclovías.
Además, la formación naranja busca estimular el uso de vehículos eléctricos estableciendo el centro de la ciudad para la prueba de estas motorizaciones.
Marañón acusa a PP y PSOE de querer una ciudad “viejuna”. Al mismo tiempo ha concluido que la ordenanza “genera incertidumbre y no favorece la convivencia” y aboga por un modelo futurista, sostenible y compacto.
