La Policía Local ha practicado cinco detenciones en los últimos días por robos, malos tratos y amenazas

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Policía Local

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Quebranto de una orden de alejamiento, robo con violencia, amenazas graves, malos tratos y un hurto son los presuntos delitos que se imputan a los detenidos

La Policía Local de Burgos ha detenido a tres hombres y a dos mujeres en los últimos días como presuntos autores de varios delitos.

La primera de las detenciones tuvo lugar el lunes 5 de mayo sobre la 1 de la madrugada en un piso de la calle Igualdad. Una mujer denunció que su expareja había quebrantado la orden de alejamiento que tiene impuesta por un juzgado y había accedido a su domicilio, ya que una tercera persona le había dado acceso. Los agentes una vez verificado que la orden de alejamiento se encontraba en vigor desde el 17 de febrero, procedieron a la detención de este hombre de 36 años.

La segunda detención tuvo lugar ese mismo día a las 7 de la tarde en la calle María Isidra de Guzmán, cuando se recibió un aviso de que una mujer había presuntamente cometido un robo con violencia, entrando a la fuerza en una vivienda donde sustrajo un televisor. Varios testigos presenciaron los hechos e informaron de las características de esta persona. Posteriormente, y ya en la calle Victoria, esta mujer de 46 años fue localizada y detenida portando la citada televisión.

La tercera detención tuvo lugar el miércoles 7 de mayo sobre las 8:45 horas de la mañana en una vivienda de la calle Clara Campoamor, tras varios avisos al teléfono emergencia 112 en el que se informaba de una presunta agresión con arma blanca. De inmediato varias las dotaciones de la Policía Local se personaron en el lugar y procediendo a la detención de un joven por amenazar de gravedad a su madre. Tras la detención y mientras fue asistido en el Hospital Universitario de Burgos, debido al estado de ansiedad que presentaba, acometió de forma violenta contra un agente, sin que afortunadamente le causará lesiones.

La cuarta detención, protagonizada por una mujer de 58 años, tuvo lugar el viernes 9 de mayo en un piso de la calle Teresa Jornet sobre la 1 de la madrugada, debido a una agresión por malos tratos a su pareja.

Para finalizar la última y quinta detención tuvo lugar el domingo 11 de mayo sobre las 10:45 horas de la mañana en la calle La Paloma, cuando agentes que realizaban funciones de vigilancia y de control de la zona centro fueron requeridos por un comerciante alegando que la persona que tenía retenida había cometido un presunto hurto en su establecimiento. Tras un posterior cacheo de seguridad se pudo localizar al menos 12 productos provenientes de diversos establecimientos de alimentación, presuntamente todos sustraídos, por lo que los agentes procedieron a la detención de este joven de 20 años.

 

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