El Obispillo recorre las calles de Burgos
El Obispillo recorriendo las calles de Burgos
Fotos: Pedro Antonio/Studio 43
Beltrán Rubio, Obispillo de este año, cumplía con la tradición paseándose por las calles de Burgos a lomos de un caballo blanco. A Beltrán le acompañaban Erix Romero, en calidad de vicario y de Hugo Pérez y César Cuesta, los mismos que el año anterior, como secretarios.
El monasterio de las Salesas acogía el primer acto de este día, en el que se investía a Beltrán con sus vestiduras. Tras la visita al arzobispo, Mario Iceta, se dirigía al Ayuntamiento a lomos del caballo blanco donde era recibido por el teniente alcalde, Manolo Manso.
En el Ayuntamiento Beltrán Rubio recordaba que “cuando faltan recursos y el presupuesto no alcanza, la música se apaga un poco y con ella se apaga también una parte del futuro cultural de Burgos” haciendo una llamada y una invitación hacia Burgos 2031.
Para despedirse de los asistentes y del público que se congregaba en la Plaza Mayor, los Pueri Cantores entonaban una versión de Pentatonix de “El Tamborilero” que el próximo 3 de enero presentarán en el Concurso Nacional de Coros de Puy du Fou.
La fiesta del obispillo es una antigua tradición navideña que se remonta a la Edad Media, y consiste en la investidura de uno de los niños de la Escolanía de los Pueri Cantores de la Catedral y que ese año hace su primera comunión como máxima autoridad. La tradición se perdió al desaparecer la escolanía, pero se recuperó en 1998.












