Los burgaleses aumentan las quejas ante la “nefasta” gestión del bipartito

Los populares lamentan el retroceso en transparencia, así como el elevado número de quejas sin contestar

El Grupo Municipal Popular del Ayuntamiento de Burgos considera que el informe anual de la Comisión de Sugerencias y Reclamaciones es “un fiel reflejo de la parálisis y opacidad con la actúa el bipartito y un retroceso en la transparencia del Consistorio”.

Así lo ha señalado este miércoles la edil popular, Andrea Ballesteros, que ha explicado que el número de quejas y reclamaciones se incrementó un 25% a lo largo de 2020, en comparación con la anualidad inmediatamente anterior, incluso pese a la situación de confinamiento vivida.

A estos incrementos hay que añadir que muchas de ellas ni siquiera se contestan, como es el caso de las que recibe Alcaldía, donde solo una de cada cinco quejas o sugerencias obtuvieron una respuesta el pasado año.

Todo ello, ha apuntado Ballesteros, pese a que se ha registrado un aumento considerable en el coste de los servicios, que choca frontalmente con la merma de la calidad de los mismos que perciben los burgaleses.

Una situación “incomprensible” a juicio de la edil popular, quien ha lamentado que esta sea la tónica general del binomio PSOE-Cs que, desde que se materializó para sostener a Daniel de la Rosa en la Alcaldía con mayoría absoluta, “solo ha incrementado la opacidad en la gestión municipal y aplica el rodillo para evitar escuchar a los grupos municipales y los ciudadanos”.

Ejemplo de esta cuestión, ha dicho, es lo sucedido en el último Pleno, cuando el equipo de Gobierno se negó a responder a preguntas al considerar que no era el foro adecuado o las últimas declaraciones del concejal de Fomento, Daniel Garabito, en las que ha hecho oídos sordos a las quejas de los vecinos de la plaza Santiago y ha confirmado que el bipartito no tiene ninguna intención de dar una solución al problema generado con las casetas de obra.

Una actitud que se corrobora también en el hecho de que no se haya constituido formalmente la figura del Defensor del Ciudadano, que fue aprobada en sesión plenaria con los votos del PSOE y que solo viene a demostrar “la política de fachada y marketing del equipo de Daniel de la Rosa”.

“Mientras esto sucede, el Ayuntamiento tiene más de 40 millones de euros en las cuentas municipales y unos contratos, como los de mantenimiento de parques infantiles y bancos, que permiten dar solución a los problemas de éstos de una forma rápida”, ha aseverado Ballesteros, antes de añadir que, por ello, “es aún más incomprensible que haya quejas que no se solucionen con contratos millonarios que permiten soluciones en tres días”.

Frente a esta actitud, Ballesteros ha puesto en valor la apuesta por la transparencia que ha realizado el Grupo Municipal Popular y que, sin embargo, se ha encontrado con el portazo del PSOE y Cs a la hora de permitir grabar las reuniones municipales, por ejemplo.

Andrea Ballesteros ha insistido en que el descontento, como muestra el informe anual de la Comisión de Sugerencias y Reclamaciones, es generalizado entre los burgaleses y la parálisis municipal ya no es algo de lo que advierta el Partido Popular, sino que lo hacen los propios vecinos de Burgos.

Por ello, ha comprometido los esfuerzos de la formación a trabajar en favor de una mayor transparencia y ha insistido en que muestra de ello es la gestión iniciada por la presidenta del Distrito Sur, Carolina Blasco, que tras la reunión de constitución de la Junta de Distrito, se comprometió a buscar una solución a los primeros problemas trasladados por los vecinos de la zona, consiguiendo en un día solventar los problemas manifestados respecto al parque infantil del Crucero, cuyos elementos estaban deteriorados pese al contrato que exige tenerlo a punto.

Ante esta gestión del “despilfarro”, ha concluido Andrea Ballesteros, el PP continuará trabajando para atender las necesidades manifestadas por los burgaleses.